martes, 22 de mayo de 2012

FINAL 1ª TEMPORADA "CON EL CULO AL AIRE"


La que podríamos denominar como serie revelación patria de esta temporada llega a su fin en esta primera temporada. “Con el culo al aire” ha acabado de emitir los trece capítulos de su primera tanda con un final a lo happy ending bastante ordinario y bastante inverosímil a la hora de jugar las cartas del pasado y del personaje de Bobby. Por otro lado, resulta agradable de ver y es un buen colofón final porque realmente los personajes han conseguido calar en mayor o menor medida en la audiencia, pero el nivel del guion de este último capítulo ha sido un poco menor que alguno de los mejores episodios que nos ha regalado la comedia de Antena3.

En este broche final, prácticamente lo único que se deja en alto es la obligación que ha contraído Bobby (Jesse Johnson) en casarse con una mujer que no es Candela (Hiba Abouk), que hace de gancho entre temporadas, además de tener de nuevo a Jorge rendido a los pies de Eli.  Hablando de este último personaje, y como ya dije en mi anterior artículo, lo que mejor ha funcionado durante esta temporada es ese cuadrángulo de amistad-amor formado por Jorge (Raúl Arévalo), Eli (Carmen Ruiz), Ángel (Raúl Fernández) y Sandra (María León). Y ya no hablo a la hora de la tensión sexual no resuelta necesaria para enganchar al público, sino a la hora de ofrecernos contenidos bienhumorados, enredos y equívocos. Ya que esta serie se diferencia por ejemplo de “Aída” en que no tiene pretensiones de sitcom como lo pudo tener “Vida loca” sino que intenta conseguir más bien el efecto cómico de “Aquí no hay quien viva” o “La que se avecina”.

Por otro lado, se va asentando que realmente es una ficción adulta, ya que los personajes más jóvenes y más ancianos se van relegando cada vez más en las tramas. Tanto Dani (Víctor Palmero), Dulce (Henar Jiménez), los hijos de Tino, Serafín (Cesáreo Estebánez) y Juana (Teresa Lozano) prácticamente están desapareciendo de las tramas para aparecer muy tangencialmente. La excepción a todo esto ha surgido en  la incorporación del personaje de Javi (Adam Jeziersky) convirtiéndose en cómplice y espiral autodestructiva de Tino, haciéndose con los galones del perfil más juvenil en cuanto a reparto. En este final, se intenta cerrar las dos bodas que se habían planteado en capítulos anteriores, pero lo hacen de una forma bastante sencilla y sin rebanarse los sesos, además del ya mencionado “Deux ex machina” del dinero de Bobby, que aunque sí que estaba sembrado resulta bastante sacado de la manga, y no cuadra mucho con el personaje (o tal vez con el actor). Lo más positivo de este final es que los personajes están cada vez más cimentados y más claros, y los actores saben perfectamente por dónde tirar sus diálogos y sus actitudes. El personaje que se me queda más colgando es Chema (Vicente Romero), que ha oscilado de una actitud “hijoputista” con ciertos matices, a ser un gay pegajoso y pesado, para ser ahora algo bipolar en cuanto a su cabronismo. Será cuestión de buscarle unas situaciones y una historia más definida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Entradas populares