Cuando a la tripulación de la nave Enterprise le ordenan que
regrese a casa, descubren una imparable y terrorífica fuerza que, desde dentro
de su organización, ha hecho saltar por los aires la flota y todo lo que esta
representa, sumiendo al mundo en una profunda crisis. Con un asunto personal
que resolver, el capitán Kirk encabeza una incursión a un planeta en guerra
para capturar a un hombre que es un arma de destrucción masiva. A medida que
nuestros héroes se van sumergiendo en una épica partida de ajedrez a vida o
muerte, el amor se verá puesto a prueba, las amistades se romperán, y habrá que
hacer ciertos sacrificios por la única familia que le queda a Kirk: su
tripulación.
J.J.Abrams sabe conjugar perfectamente la espectacularidad
de la acción o de la trama que está contando con una cierta profundidad de
personajes. Tal como lo hiciera con “Lost”, ahora se ha preocupado con buenas
artes de hacer que los personajes de Kirk y Spock, y así mismo la relación que
les une, esté bien dibujada (o de mejor forma que en la primera). Chris Pine, dando vida al primero, y Zachary
Quinto haciéndolo con el segundo, son notables encarnaciones de los prototipos
que maneja el director. En estos términos, también se nota su mano a la hora de
dar una cierta comicidad a algunos de los personajes, pero manteniendo además
una gran cantidad de guiños a la serie original, que seguro harán las delicias
de los fans de la mítica saga. Entre estos guiños volvemos a tener de nuevo el
cameo impagable de Leonard Nimoy dando vida por enésima vez a Spock, además de
la participación de Peter Weller, también actor de la serie en su versión más
reciente.
En cuanto al argumento central, tiene menos complejidad que
la anterior entrega, pero quizás más potencia emocional. Porque la relación de los
dos personajes centrales ha alcanzado un nuevo estadio sembrado ya en su precuela.
La película tiene a su vez un gran villano. Es raro que
todavía no le hubiera ofrecido un personaje de esta índole al actor Benedict
Cumberbatch, el Sherlock de “Sherlock”, con esos rasgos faciales tan peculiares
y esa dicción tan irónicamente londinense. Aquí da vida a Khan, el archienemigo
más conocido de la saga “Star Trek”, con una fuerza que hace entrar a la
película en otra dimensión, sino mejorando, manteniendo la calidad y la
intensidad de la primera realizada por J.J.Abrams. Completan el reparto la
exótica Zoe Saldana, Karl Urban repitiendo de nuevo papel, el siempre cómico
Simon Pegg, John Cho, Alice Eve y Anton Yelchin. Mi puntuación: 7 sobre 10.
“Star Trek: en la oscuridad” se estrena este viernes 5 de julio en las salas españolas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario