Chris Pierzynski (Clive Owen) ha cumplido una condena de
varios años en prisión por haber participado en un ajuste de cuentas. Su
hermano pequeño Frank (Billy Cudrup), agente de policía con un prometedor
futuro por delante, lo espera con reticencia a la salida de la cárcel. Chris y
Frank siempre han tenido sus más y sus menos. Sin embargo, sus lazos de sangre
los unen y, por ello, Frank da una oportunidad a su hermano: lo aloja, le
encuentra un trabajo, le ayuda a retomar el contacto con sus hijos y su ex
mujer. Chris conoce a Natalie (Mila Kunis), que encarna la esperanza de
emprender una nueva vida, pero pronto su pasado llamará otra vez a su puerta.
La cuarta película del francés Guillaume Canet tiene en su
reparto al cast más internacional hasta la fecha que ha conseguido reunir. La
película es un remake del largometraje francés “Liens de sang” de Jacques
Maillot, y nos cuenta una historia criminal en los años 70 donde la relación de
dos hermanos tiene un papel muy importante en todo ello. Tenemos por un lado al
hermano que se ha situado en el lado equivocado de la justicia, que ha pagado una
pena muy alta por vengar a su mujer muerta a manos de un hombre, pero que no es
un santo en malas circunstancias ya que su temperamento le juega malas pasadas constantemente. Por otro
lado tenemos al hermano que se convirtió en policía, que abandonó a su hermano
cuando este se encontraba en prisión pero que tiene un lío con una chica de un
delincuente al que él mismo ha encarcelado. A partir de aquí, se crea una trama
en el que las decisiones de los dos hermanos interactúan continuamente con el
del otro, poniendo en jaque sus sentimientos y su vinculación con su padre.
A estos dos personajes ya de sí tan contradictorios y
antagonistas, obligados a entenderse por los lazos que los unen, hay que sumar
un padre que intenta lidiar entre ellos, la novia del policía que no tiene nada
claro lo que están haciendo, su ex que ha jurado vengarse del policía por
robarle a su chica, la ex del hermano delincuente con la que comparten dos
hijos, la nueva novia del delincuente… un cóctel entretenido que se mueve por
cauces seguros pero que nunca llegan a sorprender del todo. Clive Owen encarna
un muy creíble expresidiario que tendrá que aceptar la ayuda de Billy Cudrup,
sorprendentemente eficaz en una interpretación que se asemeja mucho a la
ofrecida por Matthew McConaughey en “True detective”. Sorprende ver a la gran Marion Cotillard en un papel tan
minoritario, prácticamente testimonial. Completan el reparto nombres como el de
James Caan, Mila Kunis, Zoe Saldana o Lili Taylor. Mi puntuación: 6 sobre 10.
“Lazos de sangre” se estrena este viernes 27 de marzo en las salas españolas.
Crítica de Héctor Izquierdo
No hay comentarios:
Publicar un comentario