lunes, 29 de diciembre de 2014

BASILIO MARTÍN PATINO. LA DÉCIMA CARTA

Uno de los directores de la corriente considerada como Nuevo Cine Español en los años sesenta es sometido a un análisis de su trayectoria y su vida actual. Basilio Martín Patino lleva muchos años alejado del mundo del cine tanto por su avanzada edad como por la época en la que trabajaba en el medio.

La cineasta Virginia García del Pino afronta su primer documental como directora, siguiendo la vida de este hombre durante varios meses e intentando recuperar todos los documentos y momentos de su carrera cinematográfica. El trabajo de búsqueda de material en filmotecas y archivos, así como la necesidad de aparatos en los que poder visionarlo abarca una buena parte del recorrido del film. El propio protagonista de la cinta se extraña de que le quieran hacer un documental sobre su persona cuando lleva tanto tiempo desvinculado del mundo profesional y da mucha importancia a todos sus coetáneos que acompañaron a aquel soplo de aire fresco de la historia del cine español. La intención de la realizadora es conseguir mediante un homenaje y una recuperación de la obra de Martín Patino que sea reconocido como uno de los autores importantes que se arriesgó franqueando a la censura y al régimen en sus años. El propio título ya encauza la intención hacia la que fue su primera película, “Nueve cartas a Berta”, la cual obtuvo la Concha de Plata en el Festival de San Sebastián de 1966. Y desde ahí continúa hasta su triología documental “Canciones para después de una guerra”, “Queridísimos verdugos” y “Caudillo”, todos ellos estrenados después del final del Franquismo porque se hicieron sin permiso en la clandestinidad y sin posibilidad de difusión.

En el transcurso del rodaje se va notando un aspecto con el que seguramente la directora no contaba a la hora de hacer su documental, es la manera en que la vejez y el olvido van ganando terreno en las personas al llegar a cierta edad. Basilio Martín Patino ya no recuerda muchas cosas de sus años de cineasta, revisando sus notas y archivos de documentos no tiene memoria de haber escrito todo lo que allí está pese a identificar su letra. Entre todos los libros de su biblioteca personal se pasa días buscando alguno pero no lo consigue localizar. No está seguro de dónde tiene guardados los premios que recibió a lo largo de su carrera, incluso él mismo se asombra al ir a visitar las oficinas de la que era su productora de cine. Resulta duro incluso desde él mismo ser consciente de ese deterioro de la memoria, lo cual refuerza la idea de desconocimiento que pueden tener las nuevas generaciones de profesionales hacia esta figura. “Basilio Martín Patino. La décima carta” se estrenó el día 4 de diciembre en circuitos reducidos.

Crítica de Sergio Cardete.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Entradas populares